Offshore

En la mañana del sábado, tras pasar una noche muy movida por el fortísimo viento, nos pusimos rumbo a Luanco. En el corto viaje de no más de 20 minutos, pudimos observar los estragos que habian causado estos vientos huracanados. Este adjetivo puede parecer excesivo para quien no haya visto como nosotros, a dos coches completamente aplastados por una caseta de obra de grandes dimensiones, esta se encontraba apilada a una altura de unos 3 m. y parece ser que a causa del viento se desplomó sobre ambos vehiculos. Tambien arboles arrancados vayas publicitarias y muros destrozados, etc.

Al llegar a la playa vimos que la cosa no estaba muy diferente, tiramos algunas fotos mientras esperabamos que se pusiese mejor. La gente tardó lo suyo en ir entrando al agua, el viento parecía querer destrozarlo todo. Pero desde ese momento hasta que la marea lo permitió, se pudo disfrutar de alguna ola buena.

Por desgracia,el ambiente en el agua no fué tan bueno. Quiero subrayar que estas palabras son sin ningún ánimo de ofender a nadie, pero hay gente que piensa que por surfear mejor que los demás y llevar entrando 20 años en una playa, puede ir saltando ola tras ola a la gente. No conforme con eso, además pedir que se les respeten. Para eso primero hay que dar ejemplo. Además... ¿no estamos todos ahi para pasarlo bien?. Pero bueno, repito que tampoco quiero crear pólémica, solamente que reflexionemos todos un poco y pensemos en lo que queremos para nuestro deporte.




Así era la pinta que mostraba la serie entrando en la playa.





Iñaki fué el primero en meterse al agua.

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Chusín.

Borja de camino al agua y Campa que se iba a buscar otras opciones.

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Para que no te olvides Miguel.